Esta receta la hacemos todas las navidades. Es la receta por excelencia de mi padre.
La receta original es de mi tía Sara, o al menos eso creemos, por que fue ella quien se la pasó a mi padre.
Es por eso que esta vez las fotos no son en mi cocina, sino en la de mi familia.
Para mi es la mejor manera de comer los langostinos, calentitos y con naranja.
INGREDIENTES
1 kg. Langostinos
4 Naranjas de zumo
1 dedo de Coñac (más o menos el fondo de un vaso o 6-7 cucharadas)
7-8 dientes de Ajo
Aceite y Sal
¡EMPEZAMOS!
Nosotros, y cuando digo nosotros digo mi padre, hacemos los langostinos en una cazuela de barro, aunque se puede hacer en otra cualquiera.
Sofreimos los ajos laminados o picados en abundante aceite de oliva. Personalmente me gustan más cuando están picaditos, muy pequeñitos.
Cuando los ajos están dorados echamos los langostinos, crudos y descongelados. Les añadimos sal, al gusto, más o menos una cucharada pequeña rasa.
Debemos dejar que se cocinen poco a poco, a fuego medio. Dar vueltas de vez en cuando para que todos los langostinos vayan impregnándose del sofrito.
Antes de terminar de cocinarse, a los 5-6 minutos, echamos el zumo de las cuatro naranjas.
Personalmente prefiero exprimir el zumo antes de ponerme a cocinar, de esta forma aprovechamos todo el zumo de la naranja y ya lo tenemos preparado para echarlo de una sola vez. ¡Pero cada uno tiene sus manías!
Damos unas vueltas para que los langostinos cojan todo el sabor de las naranjas.
Echamos el coñac y, con el extractor de humos quitado, le prendemos fuego. Para prender el alcohol, las cerillas de palo largo son la mejor opción ¡y la más segura!.
La llama se apaga sola al consumirse el alcohol.
Damos unas vueltas y ¡Listo!, langostinos a la naranja.
Consejo: Al pelar los langostinos untarlos en la salsita de naranja antes de comer. ¡¡Un manjar!!